Liceo Matilde Brandau de Ross estuvo de aniversario y lo celebró con una emotiva ceremonia.

Sin duda que el Liceo Matilde Brandau de Ross, ubicado en pleno centro porteño en Avenida Brasil, es un referente cuando se habla de educación en Valparaíso.

110 años de diversos momentos, pero que los encuentra en este minuto en buen pie y tratando de aportar con su sello cuando la educación está en tiempos complejos producto de la pandemia y la convivencia escolar.

Consciente de esta situación, la comunidad ha hecho esfuerzos tendientes a minimizar los efectos de contexto y a reforzar los valores que la caracterizan.

En su discurso la directora del establecimiento, Alejandra Paredes, destacó que los actuales alumnos nacieron conectados a “un entorno globalizado, conectados a múltiples realidades” y que esto impone desafíos a los docentes que deben entregar “una educación actual tiene que estar acorde a las nuevas formas de relacionarnos» y que el legado a entregar debe estar marcado por la «autonomía, compromiso y responsabilidad social y espíritu democrático».

“Es muy emocionante y causa mucha alegría poder brindar una oportunidad a tantos niños y jóvenes, apostamos por la mejora constante desde kínder a cuarto medio. Trabajamos con un trabajo coordinado entre los profesores jefes y el departamento de convivencia escolar, apostando por una participación responsable de los alumnos, haciendo que conozcan la realidad local”, comentó posteriormente.

Manuel Pérez, director del Servicio Local de Educación Pública de Valparaíso, destacó que “son 110 años de un establecimiento emblemático, que en su lema dice ‘construyendo futuro’, pero yo diría que es construyendo pasado, presente y futuro; con una característica y sello artístico, cultural y técnico enorme, donde se demuestra que la educación integral es efectiva dándole oportunidades a una serie de niños y niñas que bajo otra figura no sería posible que llegasen a la movilidad social que se encuentra reflejada en los egresos e inserciones que tiene el establecimiento”.

Agregó que “sin duda hay un trabajo enorme del equipo directivo, de la directora, y una mística que se nota en cada momento. Fue una ceremonia sobria, pero tremendamente profunda con la participación de una comunidad que está contenta donde está”

Superar tiempos difíciles

Pablo Lazcano, docente desde el 2014 en el recinto, comentó que “para nosotros es un momento súper importante, son 110 años donde liceo Matilde Brandau está formando a niñas niños y jóvenes de Valparaíso, siendo emblemáticos en la ciudad y vivir esto, después de una pandemia y tiempos tan difíciles, es conmovedor, porque nosotros pese a las dificultades del camino hemos sabido responder a las necesidades de nuestros estudiantes, nuestros apoderados y nuestras familias”.

Justo sobre este punto se refirió Mario Vidal, presidente del Centro de Estudiantes, quien comentó que para los alumnos es un día especial, sobre todo “con últimos años con tiempos complejos y lleno de desafíos”. Explicó que, en época de crisis pandémica, estando en sus casas, “no fue fácil y manifiesto un profundo agradecimiento (al liceo) por llegar a nuestros hogares. Ahora hemos vuelto a la presencialidad y nos llena de felicidad y profunda gratitud».

Georgina Figueroa, alumna venezolana de séptimo año, asegura que en el liceo la han tratado muy bien desde de que llegó y participar en el aniversario 110 para ella fue “muy bonito por la ceremonia”. En tanto su compañera Katherine Zumba, de Ecuador, relató que le encanta el liceo: “Es muy bonito estar aquí, me siento muy querida por los profesores y me gustaría quedarme mucho tiempo más”.

El broche de oro de la actividad fue la presentación Orquesta Pública de Estudiantes de Valparaíso, Opeval, que deleitó a los asistentes con diferentes piezas musicales con la calidad que los caracteriza.